Viajando desde la cocina: nuestros imanes de nevera favoritos

Cualquier día, a cualquier hora. Entras en la cocina, con intención de coger algo de la nevera. Y cuando te das cuenta te ves observando, una vez más, los tropecientos imanes que pueblan el frigorífico. Recuerdos, sentimientos y cierta nostalgia fluyen sin querer. Otra manera de volver a viajar, esta vez desde nuestra cocina….

Reconozco que no somos muy de souvenirs. Si nos traemos algo para casa suele ser gastronómico, típico del lugar que hemos visitado. Un botella de vino, queso, alguna conserva especial,… son algunas de las cosas que compramos para nuestros menús temáticos. Pero lo que no falla nunca es algún imán de nevera.

Al final del viaje son varios los imanes que vienen en la maleta. Con la tontería nos dejamos una pasta en ellos. Pero… ¡y lo chula y colorida que queda la nevera!

Aquí te dejo algunos de mis favoritos:

• Austria:

En Kapitelplatz de Salzburgo, después de visitar la fortaleza de Hohensalzburg, nos paramos en unos puestecitos de recuerdos que se encuentran en la plaza. Con unas vistas impresionantes a la fortaleza compramos este divertido tirolés. Esos pantalones cortos con sus tirantes… ¿Hay algo que más representativo de Austria? Pues no… quitando la flor de edelweiss que se encuentra en la montaña austriaca.

• Escocia:

¡Ohhh! Nuestra querida Nessy. Desde luego, uno de los lugares mágicos de Escocia es el lago Ness y ¡su monstruo! Nessy es uno de los iconos del país y te lo encuentras en toooodos los sitios. Así que… nos la llevamos para casa.

• Finlandia:

No podía faltar Papá Noél y su trineo en nuestra nevera. Aunque el mejor recuerdo que nos trajimos de este país fue la experiencia en sí y la foto con Santa Klaus, el día de regreso, en el mismo aeropuerto compramos el imán: “I love Lapland”

• Marruecos:

Este imán le tengo un cariño especial. Representa una de las experiencias más enriquecedoras que hemos vivido en familia. La noche en el desierto de Erg Chebbi fue tan especial que lo recordaremos siempre.

• Croacia:

De nuestro viaje a Croacia en furgo podríamos decir que fue el viaje de los descubrimientos. Conocimos Venecia, ciudad que teníamos muchas ganas; alucinamos con Eslovenia por su naturaleza y sus paisajes; y descubrimos Croacia con lugares increíbles como el parque nacional de Plitvice o ciudades como Zadar, y sus contrastes entre la costa, súper turística, y el interior, con la huella patente de la guerra.

• Grecia:

Llegamos a este país en un crucero por el mar Adriático. Para mi gusto no es la mejor manera de viajar pero te da la oportunidad de conocer destinos increíbles, aunque sea por unas horas. Poder ver Corfú, Santorini u Olimpia en unos días es un lujo. Y plantarte a los pies del Partenón de Atenas fue un sueño. ¿Cuantas veces lo habíamos visto en fotos? Así que… nos lo tuvimos que llevar a casa…

• Montenegro:

Otro destino que pisamos en nuestro crucero. Este sí que fue visto y no visto. Pero la entrada a fiordo de Kotor y conocer la ciudad nos valió para saber que Montenegro es una joya en bruto. Debemos volver…

• Malasia y Singapur:

Por supuesto no podía faltar un imán de Kuala Lumpur y Singapur como recuerdo de este viaje, el primero en muchas cosas.

• España:

Cuando viajamos por España también nos traemos nuestros recuerdos. ¿Quién se va a resistir a esta “furgo” de Córdoba? O este imán de La Gomera, cuando la artesanía en la isla es algo que no te puedes perder.

También tenemos imanes de países en los que no hemos estado pero nos recuerdan lo mucho que deseamos viajar a ellos. Suecia, Perú, Vietnam, Tierra de Fuego, California,… están en nuestra nevera, en esos imanes que nuestra familia y amigos nos han traído de sus viajes.  

Si cada imán de nevera corresponde a un viaje, esperemos que se agoten los huecos libres de nuestro frigorífico para colocar más y más.
¿Y tú? ¿Qué sueles traer de tus viajes?

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