Siempre en nuestros viajes intentamos buscar alguna actividad chula que les dé vidilla a las niñas. Y, como esto de viajar con niños es un ten con ten, siempre nos reservamos algún día para hacer cosas que les motive y que disfrutemos los cuatro por igual.
Cuando Andorra Turismo nos propuso vivir la experiencia de disfrutar Andorra en invierno no nos lo pensamos dos veces. Si Andorra con niños en verano es muy divertida, en invierno, con la nieve como fondo, debía de ser increíble.
¿Qué podemos hacer en Andorra con niños en esta época del año además del esquí alpino, el “deporte nacional” de este país? Pues… ¡muchas cosas más!
¡Dale al play!
Caldea
El termo-lúdico por excelencia. Uno de los primeros en la península y el más innovador. Un súper spa, como dicen las niñas, con una arquitectura muy original donde te relajarás en su piscina de agua caliente en el interior del edificio y sentirás el frío intenso en la cara saliendo a la piscina exterior. Además dispone de baño turco, sauna, termas romanas…
La última vez que estuvimos en Andorra con las niñas no pudimos entrar ya que la peque no llegaba a los 5 años, edad mínima que exigían para hacer uso de las instalaciones. Ahora, los más pequeños tienen suerte. Acaban de inaugurar Likids, el spa exclusivo para niños de 3 a 8 años.
¡Qué nadie se quede sin disfrutar de Caldea!
Naturlandia
En Saint Julià de Lòria podremos encontrar Naturlandia, un parque de aventuras en medio de la montaña. Hay numerosas actividades para disfrutar en familia, variando según la época del año en que nos encontremos.
Puedes iniciarte al esquí de fondo. Podrás alquilar el material y lanzarte a seguir las huella marcada en la pista. Y si no eres un experto puedes contratar un monitor que te enseñará todas las técnicas que debes conocer de este deporte.
O quizá te resulte más atractivo hacer una ruta con raquetas de nieve. No hay nada más agradable que caminar con estos artilugios por la nieve recién caída y ¡no hundirte!
Además podremos hacer tubbing, tirarnos con trineos y, como no, lanzarnos por el Tobotronc, el tobogán de naturaleza más largo del mundo: 5,3 km de recorrido montado en un trineo biplaza sobre raíles que podrás controlar con las palancas donde colocaremos nuestras manos y nos servirán para acelerar y frenar.
Palau de Gel
El palacio de hielo, que se encuentra en Canillo, es un centro deportivo donde puedes patinar sobre hielo en su pista y hacer unos largos en la piscina climatizada semiolímpica que disponen, además de ponerte en forma en el gym o escalar en el rocódromo interior.
Patinar sobre hielo es una actividad muy divertida para hacerla con niños ¡incluso con los más peques! Disponen de unas sillitas donde se pueden sentar lo más pequeñines y empujar y sujetarse los que son un poco más mayorcitos.
Aparte de todo esto hay actividades infantiles que se desarrollan dentro de la pista, como quads eléctricos o karting infantil.
Motos de nieve
¿Te imaginas conducir por nieves vírgenes, entre árboles? Tuvimos la suerte de probarlo con las niñas en Grandvalira. Cada una de ellas, junto a uno de nosotros, nuestros cascos bien colocados, cogiendo velocidad en los tramos llanos sin mucha pendiente, y reduciendo en la zona más boscosa. Y, mientras, disfrutando del paisaje de Andorra.
Tubbing
Pero ¡qué divertido es esto del tubbing! Consiste en sentarte en una flotador gigante y lanzarte por una pendiente nevada, dejándote llevar hasta el final. Te partirás de risa cuando empieces a girar, incluso cuando te choques con algún otro flotador.
Mushing
Sin ninguna duda ésta es una de las experiencias más bonitas que hemos vivido nunca: pasear en un trineo tirado por perros.
Perritos bien cuidados y amigables nos esperaban en Grau Roig, en Grandvalira deseando ponerse a correr cuanto antes. Montados en el trineo, mientras que los perros corren sin fin, el aire frío te da en la cara. No te atreves ni a hablar para no interrumpir el espectacular sonido del trote de los animales y el suave deslizamiento del trineo.
Museos de Andorra
Y no debemos perder la oportunidad de conocer la cultura y la historia de este país. Y qué mejor que visitando sus museos, con niños, por supuesto.
Podemos encontrar de todo tipo: centros de interpretación de la naturaleza, del románico andorrano, del hierro…; museos más concretos como el del automóvil, el tabaco, la mina de Llorts (aunque ésta está cerrada en invierno); o museos etnográficos como la Casa Cristo o Casa Rull, que fue la que conocimos en esta ocasión.
Casa Rull es una casa del finales del siglo XIX, principios del XX, donde aprenderemos cómo era la vida de una familia campesina con tierras, donde el cultivo de éstas y la explotación ganadera era la manera de subsistir en aquella época. Es muy interesante visitarla con los peques, para que entiendan que hace años la vida no era como hoy en día.
¿Y para dormir en nuestra furgo o autocaravana?
Sin problemas. Hay varias áreas de autocaravanas repartidas en todo el país, y aparcamientos, sobre todo ubicados en las pistas de esquí, donde se puede pernoctar sin problemas. Además, hay varios campings distribuidos por Andorra.
Cierto que en Andorra la Vella hay señales de “prohibido aparcar autocaravanas”, pero hay parkings en los que puedes estacionar pero no pernoctar (en esta ciudad el aparcamiento es así, de parking en parking…)
Algo que debemos tener en cuenta para circular con nuestros vehículos en invierno es tener ruedas de invierno o disponer de cadenas. Si no es así te pueden colocar una buena multa o no dejarte acceder a algunos lugares.
Como ves, en Andorra es imposible aburrirse. Es un país ideal para viajar en familia en cualquier época del año. Lo confirmamos después de viajar a este país varias veces en verano y conocerlo en invierno.
¡Andorra con niños no decepciona!
Recordad que podéis seguirnos en Facebook, Twitter y nuestras cuentas de Instagram @viajandoenfurgo y @mario_viajandoenfurgo donde encontraréis más fotos de Andorra.